Desencantado

Yo jamás he comprendido los tecnicismos sociales, y de verdad que me esfuerzo, incluso en vivir con ello, pero lo único que consigo formar es una pequeña capa de nata que se desliza en el océano de otros significantes.
Comienzo a creer que a todas las personas les pasa, que todas las personas viven realmente sin amigos, sin profundizar mucho, sin amor, sin arte, sin nada de lo que dicen “disfrutan” en la vida, espero que yo sea el único que veo esto, por que realmente es horrible.

El idealismo que se le otorga a las cosas, ¿puede que solo sea un idealismo?, que en realidad lo que el humano siente hacia el amor, la amistad, las artes, la vida misma; sea solo un horror incontenible del cual solo se puede escapar haciendo creer a los demás que en algún sitio estas palabras tienen significado y no son solo una fantasía.

lo único que queda es la fantasía en la cual fabricar lugares y canciones y personas, fantasía que le da sentido a las palabras con el respaldo de una realidad insípida y que deja escurrir toda pintura que se le sobrepone para mostrar el frio lugar donde cada ser humano esta solo, inundado en una tina de sus desgracias y perturbaciones.

Si es verdad que cada significado se ha construido de un significante de la historia personal, también es cierto que este ultimo esta marcado por ideales, ideales no precisamente de bueno, sino también de malo.

¿Por qué la palabra tendría que existir en base a significantes con extremos, con opuestos?

Por que el ser , para ser, busca un lugar que le delimite su propia posición, su propio espacio, un lugar que le diga que el mismo esta ahí, cosa que no se puede hacer partiendo de significantes neutrales o “reales”, es por esto que el significante mueve al hombre hacia los ideales, o tal vez sea mejor decir hacia el único significante existente, el ideal, el extremo, lo inmediatamente reconocible, que en la historia personal puede ser bueno o malo, sin embargo lo que se hace es “extremisar” para reconocer.

En base a esto y si lo coincidiéramos como un análisis del significante, el ideal es lo inalcanzable, en todo momento, es aquello que te indica que hay que seguir buscando, y en esta búsqueda lo que se pretende es que sea el motor de la vida, el motor de la acción, de la moción, de motividad que convierta a un maniquí en un ser que articulado.

Lo que deja al humano con lugar de movimiento, pero sin posibilidad de alcanzar aquello que quiere, además con una terrible falta de significado, al percatarse que aquello que prometía tanto, no es mas que una simple fantasía que le ha hecho buscar en cajones vacios.

Palabras ideales sin significado, y más que sin significado, sin su parte real que en algún momento se pudiera pensar primigenio del significante.
Lo que en realidad me hace preguntar, ¿Quién inicio la fantasía?, en que punto la mentira colectiva se instauro sobre el pobre hombre y como ha conseguido mantenerse hasta hoy en día.

La respuesta se encuentra en lo horrible que puede resultar la realidad, y la falta de movimiento que esta conlleva; siendo así, no es la realidad la generadora de vida, sino la fantasía. Fantasía que da movimiento.
El hombre esta hecho de palabras, pero la palabra esta hecha de fantasías, no solo de la historia personal, sino de una historia colectiva que ha marcado la palabra como comunicador del ideal.